El concepto de «soft power» japonés ha transformado la influencia global del país a través de su cultura y valores, afectando significativamente a América Latina desde los años 90.
¿Qué es el Soft Power?
Se refiere a la capacidad de un país para influir en otros a través de su cultura, valores y política exterior, en contraste con el «hard power» (ハードパワー) basado en la coerción y la fuerza militar. Japón ha utilizado este enfoque para fortalecer sus lazos globales y mejorar su imagen internacional.
Evolución desde los 90
Desde la década de 1990, el soft power japonés ha florecido, particularmente en América Latina, gracias a la expansión global del anime, el manga y la gastronomía japonesa. Estos elementos han resonado profundamente en la juventud latina, creando una conexión cultural duradera.
El anime, con series icónicas como Dragon Ball (ドラゴンボール), Ghibli (ジブリ), Gundam (ガンダム), ha capturado la imaginación de millones de jóvenes en América Latina, convirtiéndose en una parte integral de la cultura popular. Además, la gastronomía japonesa, incluyendo el sushi y el ramen, ha ganado popularidad en grandes países como Perú, México, Argentina, entre otros; reflejando la aceptación y aprecio por la cultura japonesa en la región.
En Japón, el “soft power” es muy importante, ya que apoya el desarrollo de diversas industrias dentro del país. Por ejemplo, la prefectura de Tottori ha utilizado eficazmente el soft power para impulsar su economía. A pesar de ser la prefectura con menor población de todo Japón, Tottori se ha mantenido económicamente gracias a sus atracciones turísticas centradas en el manga y el anime, como Gegege no Kitaro (ゲゲゲの鬼太郎) y Detective Conan (名探偵コナン). Este aumento en el turismo ha generado oportunidades económicas significativas para la región, fortaleciendo su economía local y promoviendo la imagen de Tottori a nivel internacional.
Significado Global
El soft power japonés no solo ha diversificado la oferta cultural en América Latina, sino que también ha fortalecido los lazos económicos y políticos entre Japón y los países latinoamericanos. Esta influencia ha sido fundamental en la promoción de valores como la paz, la creatividad y la innovación en la región.
Un excelente ejemplo de soft power son las organizaciones nikkei y sus eventos, que atraen significativamente a individuos que no tienen ascendencia japonesa directa. Es crucial que personas con un gran interés en la cultura y el idioma japonés apoyen dichas iniciativas, ya que contribuyen a fortalecer los lazos entre diferentes países y Japón. El soft power japonés ha despertado gran atracción e interés entre muchos latinoamericanos para elegir a Japón como destino de estudios, trabajo o turismo.
En conclusión, el impacto del soft power en la actualidad es innegable. Lo que comenzó como un simple gusto por el anime o el manga ha trascendido para crear relaciones de cooperación internacional entre diferentes países, fortaleciendo así los lazos culturales y económicos entre Japón y América Latina.
Este fenómeno continúa moldeando la percepción global de Japón y su influencia en el mundo, destacando la importancia del soft power como herramienta poderosa en la diplomacia cultural contemporánea.
Por: Satoshi Waku Becario del programa “Simpatizante Nikkei” de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA)