Hoy, 26 de noviembre, se celebra en Japón el Día del Baño, una fecha que surge de un juego de palabras: ni (2) – fu (2) – ro (6), que suena similar a “baño” en japonés.
A medida que el clima se vuelve más frío, especialmente por las mañanas y las noches, muchos disfrutan más del placer de un baño caliente. Sin embargo, esta época del año también coincide con un aumento en los casos de choque térmico, un riesgo que debemos tomar muy en serio.
El choque térmico ocurre cuando la presión arterial sube o baja bruscamente debido a cambios repentinos de temperatura. Este fenómeno es más común entre noviembre y abril, cuando la diferencia entre un ambiente frío (vestidor o baño) y el agua caliente de la bañera es mayor.
🔶 ¿Por qué ocurre el choque térmico?
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Muchos baños, especialmente en Japón, están ubicados en el lado norte de la casa, donde entra poca luz solar.
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El vestidor y el baño suelen ser las zonas más frías del hogar durante el invierno.
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Pasar de una habitación cálida a un baño helado y luego a una bañera muy caliente provoca fuertes fluctuaciones en la presión arterial.
🔶 Cómo prevenir el choque térmico
1. Calienta el vestidor o el baño antes de entrar
Un calefactor pequeño puede marcar una gran diferencia. Si no se cuenta con uno, deja correr agua caliente o destapa la bañera para que el vapor caliente el ambiente.
2. Controla la temperatura del agua
Evita superar los 41 °C y limita el baño a 10 minutos. También es mejor bañarse más temprano, antes de que la temperatura nocturna baje aún más.
3. Levántate de la bañera lentamente
Hazlo con calma y, si es posible, utiliza pasamanos o sujétate del borde para evitar mareos o caídas.
4. No te bañes después de comer o beber alcohol
Después de una comida, la presión arterial puede bajar. El alcohol también causa descensos temporales. Si no te sientes bien, es mejor evitar el baño.
🔶 ¿Cuándo es más riesgoso?
La diferencia de temperatura es clave. Por ejemplo:
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En invierno: vestidor a 10 °C y bañera a 42 °C → diferencia de 32 °C.
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En verano: vestidor a 25 °C y bañera a 38 °C → diferencia de 13 °C.
Cuanto mayor es la diferencia, mayor es el riesgo.
Este 26 de noviembre, Día del Baño, recuerda disfrutar del agua caliente de forma segura. Con pequeños cuidados, puedes prevenir el choque térmico y convertir el baño en un momento relajante y saludable.
