Una estudiante universitaria japonesa, cuyo padre es de Nigeria y madre japonesa, se encontró con discriminación laboral cuando una empresa de contratación le denegó la participación en un evento de reclutamiento. Esto ocurrió porque asumieron erróneamente que era extranjera debido a su nombre y apariencia física. A pesar de ser ciudadana japonesa y haber nacido y crecido en Japón, recibió un mensaje explicando que la empresa no estaba reclutando estudiantes extranjeros, lo cual la hizo sentir desplazada y herida.
El incidente ganó atención pública después de que la estudiante compartiera su experiencia en redes sociales, destacando el problema de la discriminación basada en la apariencia y el nombre. Ella enfatizó que su identidad japonesa es sólida y que es injusto ser juzgada por criterios superficiales en lugar de su capacidad y cualificaciones.
La situación subraya los desafíos que enfrentan las personas de origen mixto en Japón, donde aún persisten percepciones erróneas y prejuicios sobre la nacionalidad y la identidad cultural.
Fuente: Mainichi Shinbun Por Satoshi Waku Beca Simpatizante Nikkei - JICA Correo: eswc500@gmail.com Instagram: @satoshi.waku