Los poros son pequeños agujeros encargados de que la piel respire, y su función es realmente importante. Cada poro contiene un folículo piloso y glándulas sebáceas que producen el sebo responsable de que nuestra piel permanezca hidratada, por lo que, un poro sano asegura la correcta hidratación de nuestra piel. Cuando hay una excesiva producción de sebo, nos encontramos ante un caso de piel grasa, mientras que el caso contrario sería piel seca.
Los poros dilatados en nuestra piel pueden deberse a muchos factores, algunos tienen que ver con características propias de nuestro cuerpo o de nuestra salud, otros, con factores externos. Dependiendo de cuál sea tu caso, será más fácil tratar la raíz del problema para prevenir la aparición de los poros abiertos, aunque recuerda, sea cual sea el motivo, es posible disminuir los poros abiertos .
Los motivos por los que podemos tener los poros abiertos pueden ser: Genética, cambios hormonales, envejecimiento y pérdida de elasticidad en la piel, alimentación,
estrés, exposición solar prolongada, contaminación ambiental, no desmaquillarse adecuadamente, falta de hábitos de limpieza e hidratación del rostro.
Tratamientos recomendados:
Hidro facial: Mediante las succión y lociones específicas se va limpiando los poros y la piel en su totalidad.
Electro Limpieza: Mediante 2 tipos de corriente se hidrata la piel con productos específicos limpiando los poros superficial y profundamente.
IPL Foto facial: Las ondas de Luz iPL ayudan a la producción rápida de colágeno lo que hace que los poros recuperen poco a poco su tamaño.
Como ves, hay varios tratamientos para de prevenir la acumulación de suciedad en los poros y mantenerlos en buen estado, también para mantenerlos bien no olvidar la buena alimentación, un estilo de vida sano y la correcta hidratación y limpieza de nuestro rostro.
Por: Jessy Estee
