En Japón, la primera ministra Takaichi Sanae se refirió a la política de ingreso de extranjeros durante su comparecencia ante el Parlamento.
El debate fue impulsado por el líder del Partido Sansei, Kamiya Sohei, quien pidió reducir el número de extranjeros que ingresan al país.
Takaichi respondió que hay sectores con escasez de mano de obra que requieren personal extranjero, y aseguró que el Gobierno gestionará con cuidado los programas de empleo destinados a estos trabajadores.
La mandataria mencionó el Programa de Trabajadores Cualificados Específicos, vigente desde 2019, y el Programa de Empleo para el Desarrollo de Competencias, que comenzará en 2027.
Ambos permiten contratar a extranjeros con habilidades especializadas, especialmente en áreas como la construcción y el cuidado de personas mayores.
Takaichi afirmó que su administración establecerá límites claros y estudios futuros para definir cómo Japón debe aceptar a los trabajadores extranjeros, en medio de un debate nacional sobre el papel de la inmigración en la economía.



