Hoy, solo con un dispositivo móvil (iphone, ipad, smartphone, etc.) se puede acceder, previo registro, a cualquier red social, como el Twitter y el Facebook, y desde luego a la misma web para acceder a diversos blog donde uno puede dejar comentarios.
En el facebook, si bien exigen que coloquen su verdadero nombre y demás datos personales y la foto del titular, existen muchos con apodos y que sin darnos cuenta son «amigos” porque son amigos de los amigos. A pesar de que uno puede limitar el acceso o ampliarlo de manera casi ilimitada, cuando uno navega por estas páginas y muros se observan personas muy «confiadas o ingenuas” o simplemente que gustan aparentar cosas o logros para mostrarse. En varias ocasiones he alertado de la peligrosidad de colocar una foto con los datos personales (dirección, fecha de nacimiento, etc.) porque eso copiado o adulterado puede ser usado para fines delictivos o no aprobados por el titular, como un préstamo a una agencia usurera o un subsidio público, etc. En el submundo de la delincuencia esos datos pueden servir para muchos fines.
Es por eso que además de prestar más cuidado en programar el nivel de acceso (solo amigos o amigos de los amigos) es importante también ser cauto en la apertura de información en las fotos, el lugar y hora que publican, identificación de los edificios, etc. Por suerte, Japón es un país seguro pero en la forma que publican algunas personas es como darles pistas de que no están en su domicilio y puedan entrar a robar sin ningún inconveniente. Además, una vez publicado en este mundo digital lo puede ver «mucha gente” que no necesariamente son de buena fe.
Otro aspecto que hay que prestar más atención en las redes sociales es el tono y el contenido de las expresiones. Una cosa es un comentario entre gente amiga y de confianza, alguna ironía o descargo de impotencia en temas políticos (las hay mucho y no me eximo), y otra cosa es ofender o desacreditar, sea de manera indirecta o directa, una persona conocida o no, insinuar un «secreto comercial o industrial” de la empresa, colocar una foto indebida o con poses que puedan ofender el buen nombre de una institución, persona o empresa, etc. A pesar de que después uno lo borre y lo retire del muro, una vez que empieza la cadena de «transmisión” el amigo del amigo y un amigo de este último y así sucesivamente pueden formar una cadena de expresiones inadecuadas o poco fundadas que pueden ofender y destruir el honor de una persona. Una broma de mal gusto puede terminar en una demanda judicial o el despido de un empleado.
Ya han habido varios casos de empleados de restaurantes y hoteles que tienen la obligación de mantener privacidad de sus clientes en haber fotografiado a artistas o personalidades de renombre y luego los ha colocado en el facebook o en el twitter provocando una situación muy embarazosa. Hay reuniones de trabajo o de familia que son muy privadas y por ende gozan del derecho a la privacidad. Por más que los comentarios sean en el «anonimato” si el caso implica una denuncia policial pueden ser identificados y penalizados.
Las empresas ya tienen diversos «guideline” (directrices) para el uso de las redes sociales de sus empleados. Generalmente, señalan que deben ser transparentes con nombre y apellido y respetando la privacidad y el buen nombre de los demás, de que no envíen juegos y aplicaciones sin previo consentimiento y que jamás deben hacer comentarios que generen polémicas ni peleas. Lo mismo cuando se hacen comentarios de productos y servicios, aun de la competencia, hay que ser respetuosos por más que los mismos no hayan sido bueno. No hace falta ser ofensivo ni mal educado para eso.
Con las fotos colgadas en el facebook también deben ser respetuosos y con comentarios no muy inadecuados para no generar situaciones ridículas o confusas que puedan incidir en las relaciones familiares y personales con amigos. Para los mensajes de persona a persona, sea para notificar en evento o una reunión, deben usar el INBOX para personalizar la comunicación por e-mail. Una simple broma de una foto un poco comprometida (ebrio, desprolijo, en compañía de alguien no conocido, etc) puede ser el inicio de un juicio por daños y perjuicios.
Los artistas, políticos y personalidades de renombre son personas públicas o casi públicas y son muy conscientes de estos riesgos y a veces no pueden impedir muchas cosas, pero un particular no es conveniente actuar como «persona pública” porque no lo son. La jugada les puede salir muy caro.
Una red social como el facebook si se utiliza con conciencia es un medio digital idóneo para la comunicación y el encuentro o reencuentro con familiares y amistades, a veces casi perdida. También es un instrumento de difusión de cosas interesantes y comentarios que nos pueden nutrir. Particularmente, he ampliado el uso de la misma después del terremoto de Tohoku de marzo del 2011 y creo que ha sido útil en muchos aspectos. Los medios como Latin-a y otros de nuestra comunidad lo complementan con la web y anuncian sus publicaciones y notas de interés. Nos permite estar actualizados y expectantes de nuevas noticias y experiencias que nos llena de más satisfacciones.
Por: Lic. Alberto Matsumoto
www.ideamatsu.com